Friday, 29 February 2008
Thursday, 28 February 2008
Esto es para mí. Lo ví, me gustó y quise guardarlo
5 A veces uno sólo quisiera empezar de nuevo <---- FACIL DIFICIL --->
6 O se siente perdido, sin rumbo, a la deriva
Otro diario de viaje.... el de un santafesino
Escuchen con atención la experiencia de este santafesino en Toronto. Autor: Dady Brieva.
El link del audio es el siguiente: http://www.goear.com/listen.php?v=834fcf4
Si prefieren leerlo, hagan click aquí: http://www.area51experience.com.ar/foro/archive/index.php/t-1001454.html
¡Veremos qué escribo yo con el correr de los días y podremos comparar!
Jajajaja.
Gracias a todos los que....
Wednesday, 27 February 2008
La Universidad de York y el Instituto YUELI
- Universidad de YORK: http://www.yorku.ca/web/index.htm
- YUELI : York University English Language Institute: http://yueli.yorku.ca/
Recordá tu "Norte"...
"Recordá tu Norte" es un mensaje que me envío a mi misma para que nunca olvide cuál es el objetivo primario y esencial de este viaje.
La finalidad es simple y precisa: estudiar inglés en el curso de dos meses que me brinda la Universidad de York. Retornaré contenta y realizada a mi país por haber vivido esa experiencia y sentiré de alguna manera que mi "cuenta pendiente" se tranformará en "asunto cerrado". Poner a prueba mi inglés, mejorarlo, pulirlo, profundizarlo, agilizarlo aunque sea un poquito va a ser suficiente. Ése es mi fin, pequeño pero enriquecedor.
Sin embargo, "Recordar mi Norte" no significa que miraré sólo en una dirección. No. Mi norte es sólo una guía, una línea conductora para no perderme, para no extraviarme. Mi mirada será amplia, multifocal, multidireccional. Allá afuera hay un Sur, un Este y un Oeste que nos rodean, nos indican constantemente que todas las posibilidades están abiertas y nos invitan a recorrerlas, a atravesarlas, a concretarlas.
Todos los caminos son posibles, pero uno los elige y los transita con mayor seguridad, una vez que ha identificado su Norte.
Hoy sólo sé cuál es mi Norte. Estando allá veré cual es mi sur, mi este y mi oeste y decidiré recién en ese entonces qué camino he de seguir. Hoy sólo sé que mi Norte me hace libre, libre para elegir.
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Mensaje a la Comunidad: Aprovecho este posteo para decirles que NO proyecten SUS expectativas en mí. Déjenme esta vez crear y cumplir MIS PROPIAS expectativas. No me inventen futuros. Ni promisorios, ni cautivadores, ni dramas, ni comedias, ni thrillers, ni de terror. No me voy a casar con un canadiense ni me voy a quedar a vivir aquí para siempre como muchos me han repetido hasta el cansancio. Mi objetivo es claro. Pero nadie sabe lo que puede pasar. Así que dejemos de especular y proyectar y empecemos sólo a vivir... cada cual con su vida.
Fin del Mensaje.
Creo que el subtitulo más adecuado hubiera sido: "Llamado a la Solidaridad", pero a esta altura, mejor dejémoslo así :o)
Fin del Posteo.
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Las "Seis Ws"
Tuesday, 26 February 2008
Por este texto, me otorgaron la Beca
"¿Cómo me beneficiaría a mi y a mi comunidad el mejoramiento de mis habilidades en el inglés?"
El Inglés Debe Ser Una Vivencia
Una persona puede estudiar muy bien el plano de una ciudad: examinar su trazado, aprender el nombre de sus calles, identificar los monumentos sobresalientes, investigar su historia, hacerse una idea de lo que es y representa. Esto es una elaboración intelectual, una idea, un concepto. En cambio, la posibilidad de caminar 20 minutos por esa ciudad es ya una VIVENCIA. Vivencia, “es ponerse uno realmente en presencia del objeto, esto es: vivirlo, vivir con él; tenerlo propia y realmente en la vida; no el concepto que lo sustituya; no la fotografía que lo sustituya; no el plano, no el esquema que lo sustituya, sino él mismo” asevera Manuel García Morente.[1]
Lo mismo ocurre con el Inglés. Ningún texto ni curso académico posibilita VIVIR la experiencia de estar en CONTACTO DIRECTO con esa lengua: hablarla, escucharla, comprenderla, saborearla, degustarla, olerla, tocarla y disfrutarla en su propio ambiente, en su propio lugar, en su calidad de anfitriona. Los cursos y los libros de inglés para extranjeros sólo brindan una idea, una elaboración intelectual de la lengua inglesa. Viajar a Canadá y ponerla en práctica es estar metida en ella, imbuida de ella, es tener a la lengua inglesa propia y realmente en la vida.
Mi nombre es María Eugenia, tengo 25 años de edad y me gradué recientemente de Licenciada en Relaciones Internacionales. Estudié Inglés, como segunda lengua, en diversos institutos académicos desde los 8 años de edad pero nunca tuve la posibilidad de VIVIRLO.
Es por ello que las Becas que ofrece YUELI son una oportunidad excepcional para muchas personas, que como yo, buscan vivir el Inglés, estudiarlo, mejorarlo y practicarlo cual un artista que pretende terminar su obra, pulirla, refinarla y darle un sentido. Obtener una Beca sería para mí el cumplimiento de un gran sueño y la obtención de una herramienta invalorable: la habilidad de comunicarme y relacionarme eficazmente en el mundo globalizado.
Me gradué de Licenciada en “Relaciones Internacionales”, una profesión que necesita del lenguaje para desarrollarse. Para generar “relaciones” es preciso poder comunicarse y en el ámbito “internacional” es el inglés el que nos permite la transmisión de valores e ideas, el intercambio cultural y el entendimiento entre los pueblos.
En lo personal, necesito VIVIR el Inglés para mi crecimiento, mi madurez, mi desarrollo profesional y mis proyectos de proseguir con estudios de postgrado. ¿Cómo beneficiaría a mi comunidad? La experiencia y formación recibida me otorgarían la capacidad para trabajar en la creación de lazos entre países e instituciones, en la apertura de canales para la cooperación, para el intercambio de conocimientos y valores, para el fortalecimiento de las relaciones existentes y la inauguración de nuevas.
Canadá y Argentina siempre han mantenido relaciones nobles y duraderas. Sería un honor para mí poder trabajar para que el intercambio cultural y conocimiento entre ambos pueblos sea cada vez más fuerte y profundo. Es mi anhelo que la Universidad de York, a través de su English Languge Institute, pueda brindarme la oportunidad y la posibilidad de que el Inglés se vuelva en mí una Vivencia.
Desde ya muchas gracias por su atención.
María Eugenia
[1] García Morente, Manuel: “Lecciones Preliminares de Filosofía”. Ed. Losada, Buenos Aires, Argentina.
Sólo un cuento...
Había una vez una nena que quería ver el mundo. Esa nena se llamaba Eugenia y tenía 15 años. Eugenia estaba convencida de que un viaje le permitiría cumplir su deseo. Un intercambio estudiantil le daría el aprendizaje y experiencia que ella anhelaba. Intuía que ese viaje le iba a cambiar la vida.
Sin embargo, Eugenia no era mayor de edad. En consecuencia, no podía hacer todo lo que ella quería porque sus padres siempre tendrían la última palabra. "No, sos muy chica". Pero si a Leo (su hermano) se lo permitieron ¿Por qué a mi no? preguntaba con insistencia. "No, sos muy chica".
A veces los temores de los padres se vuelven incomprensibles para los hijos a cierta edad y tardamos en entender que su amor es tan grande que el límite entre el "proteger" y el "dejar volar" se vuelve difuso, confuso, complicado, difícil.
Eugenia no entendió las razones en aquel momento, pero tampoco insistió más. Muy dentro suyo sabía que ella viajaría. Tarde o temprano, lo haría.
A los 17, Eugenia inició la carrera de "Relaciones Internacionales" ¿Por qué habrá sido, no? Se aprendió los nombres de todos los países, sus capitales y sus presidentes. Se interiorizó en la vida y obra de cada líder político y la historia universal se convirtió en su novela favorita. Eugenia procuró aprender inglés, italiano, portugués y francés. No sabía qué lengua le serviría para cumplir su deseo, así que por las dudas, intentaba, tímidamente, con todas.
Eugenia estudió mucho mucho pensando que el viaje estaría cercano. Los dieces en su libreta simbolizaban para ella el puente seguro que la llevarían a obtener la "visa para su sueño".
Pero un día, Eugenia se aburrió de estudiar y se cansó de esperar. Había esperado tanto ese viaje, que sentía que ya no valía la pena. El costo de su espera había sido ya tan alto, que ningún disfrute posterior podría compensarlo.
Eugenia guardó el planisferio que colgaba en su habitación y quiso olvidar que allá afuera existía un mundo. Nada de globalización, nada de interdependencia, nada de multipolarismo ni de centros de poder. Nada de Bush, nada de Tony Blair, ni de Saddam ni de Fidel.
Y Eugenia empezó a vivir en su propio mundo interno olvidándose por un tiempo dónde había dejado la llave de su puerta de salida.
En algunas ocasiones, Eugenia sacaba la cabeza por la superficie y sentía que podía llevarse el mundo por delante, enfrentarlo, conquistarlo, ganarlo. En otras, Eugenia sentía que el mundo era el que la atropellaba y volvía a guarecerse como una avestruz.
En unas de sus salidas a la superficie, Eugenia, recordó que alguna vez tuvo un sueño. Era el sueño de esa chica de 15 años que había quedado como una "cuenta pendiente" en su corazón. Y sabía que antes de "echar raíces" en alguna ciudad determinada, con un trabajo prometedor y una pareja promisoria para formar su familia, tenía que saldar esa deuda que tenía con ella misma.
Y con ese pensamiento reinició su motor de búsqueda. Cuando uno tiene identificado un deseo, "todo el universo conspira para que puedas realizarlo" diría Coelho. Pero debe ser verdadero y debes estar convencido para poder alcanzarlo.
Y así fue como Eugenia lo alcanzó.
Un viaje de estudios a Canadá tocaba su puerta. Esta vez Eugenia ya no tendría que pedir permiso. Eugenia ya era una "grandulona" de 25 años, mayor de edad, pero por dentro seguía siendo la nena de 15 que necesitaba que sus padres la apoyaran y acompañaran en su sueño. Y Eugenia ahora va a cumplirlo, va a saldar su "cuenta pendiente" ...
La Eugenia de los 15 no es la misma de la de los 25. A los 15 uno no tiene idea de la vida, a los 25 tampoco, pero al menos uno se da cuenta de eso. A los 15 era solo una colegiala de bachiller mercantil, a los 25 hay un poco más de camino recorrido, otro tipo de incertidumbres y muy pocas certezas. Hoy en mí solo hay una: ya no me interesan las "Relaciones Internacionales" en sí mismas, ahora lo que más me importa es cultivar "Relaciones Humanas" donde quiera que esté.
La Eugenia de los 25 no es la de los 15. La de los 25 cumple el sueño de la de los 15, pero a la Eugenia de hoy como a la de ayer la impulsan el mismo motivo: crecer, aprender, conocer, abrir sus alas, echarse a volar y encontrar su camino.
Este cuento no tiene fin, solo tiene un eterno continuará...
Monday, 25 February 2008
Una Breve Introducción
Para los que no me conocen, éste es mi segundo blog.
Un blog es un espacio personal. Un espacio en el que me atrevo a encontrarme con vos y me permito compartir contigo un pedacito de mi mundo más interno, de mi yo más intimo.
Un blog es, también, un espacio para encontrarse a sí mismo, por lo que muchas cosas que en él se vuelcan tal vez no sean escritas tanto para ti como para mi. Es mi espacio, mi ratito del día en que me siento a pensar y me dejo fluir.
Mi primer blog habla de mi fanatismo por el Step, una actividad aérobica grupal que yo intento defender, difundir y promover. Los invito a conocerlo. Su dirección es stepvivo.blogspot.com
Éste, mi segundo blog, no pretende ser más que un diario de viaje personal, una libreta, un anotador, una hoja borrador de los acontecimientos que sucederán y me impactarán de alguna manera durante mi estadía en Canadá.
"Una Santiagueña en Canadá" solo es un lugar para contarles cómo ve Eugenia el mundo, cómo se refleja éste en sus ojos, que la sorprende, que la emociona, que la hace reir o llorar. En una palabra, cuál es mi "visual estimativa". No tengo la verdad, tengo mi verdad. Equivocada o no, siempre subjetiva.
Este blog, no busca más que dejar testimonio por escrito del camino andado. Aunque sé que las verdaderas marcas van a quedar grabadas en el corazón.
Bienvenidos a este blog.